Duelos
Cuando fallece un ser querido nos enfrentamos a una pérdida irreparable y necesitamos ese periodo de tiempo, que es el duelo Valencia, para asimilarlo , pero no sólo un fallecimiento es una pérdida, también son pérdidas importantes en la vida de una persona la pérdida de la salud, la ruptura amorosa en cuanto que perdemos a la persona que amamos, la pérdida de una amistad…y por tanto también podemos hablar de duelo Valencia en estos casos.
¿Cual es el período de tiempo normal en un duelo?
Cuando hablamos de que es el duelo Valencia lo primero que debemos saber es que es algo totalmente normal y no constituye una patología en si misma, sino una serie de procesos emocionales que nos llevarán a asumir esa pérdida. Tampoco podemos establecer un tiempo preciso para este duelo, aunque sí se establece que un tiempo aproximado superior a seis meses para encuadrar nuestra vida después de sufrir la pérdida puede ser un indicio de un duelo patológico. Esto no significa que la persona no deba de estar triste pasados seis meses o no echar de menos a la persona que ha perdido, sino que estaríamos hablando de un tiempo razonable para que la persona asuma esas emociones y no se quede estancada sin poder retomar su vida.
Dentro de este período de duelo Valencia existen varias etapas con reacciones emocionales diferentes por las que casi todo el mundo suele pasar, entre ellas estarían la insensibilidad inicial o el estado de shock, donde parece todo irreal o que le esté sucediendo a otra persona y que nos sirve para amortiguar el dolor inicial mientras nos hacemos a la idea. La negación es una de las siguientes reacciones, donde a la persona le es difícil creer que esto le esté sucediendo a ella, todavía esperamos que no sea verdad aunque nuestra cabeza nos diga que es imposible que esa persona vuelva. Otra reacción normal sería la ira o el enfado, ¿por qué ha pasado esto si es tan injusto? ¿por qué los demás siguen con su vida?, te enfadas con los demás, con Dios, buscas culpables.
Tristeza, miedo y culpabilidad
La tristeza es sin duda el sentimiento mas común para todas las personas que atraviesan un duelo Valencia, sentimos una pena enorme, un gran vacío, todo nos hace llorar y pensamos que no nos vamos a recuperar nunca de esa pérdida. Muchas veces los sentimientos de tristeza también vienen acompañados del miedo al futuro, que va a ser de ti en el futuro, como vas a seguir viviendo, miedo también a morirte. Debemos estar atentos a que este estado de tristeza no acabe desembocando en un estado depresivo o aun mas grave, en una depresión.
Otro de los sentimientos intensos que encontramos a veces es la culpabilidad por lo que hicimos o no hicimos en el tiempo en que tuvimos a esa persona a nuestro lado o, en el caso del duelo por la pérdida de la salud, culpabilidad por todas aquellas cosas que pudimos hacer para cuidarnos mas y no hicimos, aunque en realidad nada se hubiera podido cambiar…
El miedo y la culpabilidad pueden generar también un trastorno de ansiedad.
Otras reacciones que también pueden aparecer son los sentimientos de profunda soledad, a veces el alivio por haber terminado con el sufrimiento de nuestro ser querido, sensaciones de oír a la persona fallecida, cambios de humor…
¿Cual es el período de tiempo normal en un duelo?
Tenemos que asumir que todas estas reacciones son normales pero que en el periodo de duelo Valencia no todo el mundo pasa por las mismas, ni en el mismo orden, ni con la misma intensidad. Cada persona es única en su forma de interpretar los acontecimientos que le suceden a lo largo de su vida y el duelo Valencia es parte de la vida de todas las personas en un momento u otro de su existencia. Así cada uno desarrollamos los mecanismos necesarios para afrontar la pérdida y reponernos de ella dependiendo de nuestra personalidad, nuestros experiencias en el pasado, nuestro estilo de afrontamiento. Cada duelo es único e individual.
Cuando la persona suprime estas emociones en su proceso de duelo por considerar que no son las adecuadas o por que el entorno social presiona para que siga haciendo su vida como si no hubiera ocurrido nada, podemos caer en un duelo patológico, donde las emociones reprimidas pueden somatizarse en diversos síntomas físicos. Otras situaciones que pueden generar duelos complicados pueden ser la pérdida de un hijo, una muerte traumática, los abandonos inesperados de nuestra pareja, un diagnostico de enfermedad potencialmente mortal…
Podemos decir cuando hablamos de qué es el duelo Valencia, que éste finaliza cuando las personas somos capaces de recolocar emocionalmente en nuestro mundo interior a la persona fallecida o a la pérdida que hemos sufrido. Esto no significa olvidar, pero si aceptar y asumir lo que ha sucedido y a pesar de ello empezar a realizar proyectos de futuro y generar nuevas metas.
Esta parte final del duelo Valencia no se puede dar si la persona no ha resuelto alguna de las etapas emocionales por las que ha pasado a lo largo del duelo. Entramos así en un duelo patológico, donde mi misión como psicóloga consiste en explorar todos las emociones generadas a lo largo del duelo y examinar si todas ellas se han resuelto o la persona se ha encallado en alguna y, si es así ayudarla a superar esa etapa y guiarla en el camino hacia la aceptación y la superación de la pérdida con el tratamiento para el duelo más adecuado a sus circunstancias.